MÉRIDA.- Un amplio operativo policíaco, al que se unieron varios motociclistas y vecinos, se realizó este sábado por la noche ante el presunto “secuestro” de una menor en el vecino puerto de Progreso.
Sin embargo, todo fue un malentendido protagonizado por una pareja de despistados padres que además se encontraban en estado inconveniente.
Todo inició cuando una automovilista en estado de ebriedad chocó contra una patrulla municipal en la calle 31 por 40 de este puerto.
Al lugar llegó el marido también alcoholizado, a la zona del accidente, comenzó a buscar a su hija de 5 años, ya que pensó se encontraba con su mamá cuando está tuvo el leve percance.
La situación fue subiendo de tono, pues al no ubicar a la niña, el padre de la menor comenzó a suponer que su hija había sido “sustraída” y estaba desaparecida.
Como suele suceder, prontamente esta situación fue escuchada por los vecinos y de inmediato circuló el rumor del secuestro de la menor en cuestión.
Inmediatamente elementos de la Policía municipal y un grupo de motociclistas vecina de la zona iniciaron la búsqueda. Sin embargo, no se daba con el paradero de la menor. Igualmente se movilizó a varias patrullas por diferentes sectores del puerto.
Minutos más tarde, la menor fue encontrada en su propio domicilio, ubicado en la colonia Ismael García, el cual jamás fue abandonado por la niña.
Ante esto, se llegó a la conclusión de que ambos padres de familia al encontrarse en estado inconveniente se olvidaron donde se encontraba la menor.
Hasta el momento se desconoce qué medidas se tomaron en contra de los padres irresponsables.
