En el segundo día de desahogo de pruebas en el juicio que se sigue en contra del instructor de boxeo Alejandro L.G., quien está acusado de asesinar al fotógrafo Luis Abraham González Contreras, comparecieron las novias de los dos, quienes confirmaron que estos sujetos vivían juntos en una casa en Residencial del Norte cuando sucedieron los hechos en diciembre de 2017. Ayer publicamos que el Tribunal Primero de Juicio Oral inició el desahogo de pruebas de ese proceso por el delito de homicidio calificado.
En este juicio, los integrantes de este tribunal son Fabiola Rodríguez Zurita, Desiderio Pool Cab y Danila Dzul Tec, quienes llevarán el desahogo de 75 pruebas ofrecidas por los fiscales, el asesor jurídico de la víctima indirecta y de la defensa del acusado, de modo que las diligencias están programadas para culminar el próximo 9 de noviembre.
Ayer tocó el turno de declarar a las novias, tanto del acusado como de la víctima, quienes aportaron datos de la relación que llevaban los dos individuos.
A preguntas de los fiscales, Elizabeth, quien fue novia de la víctima, manifestó que conoció a Luis Abraham en el año 2014 porque asistían a un gimnasio en Altabrisa y en noviembre de 2015 iniciaron una relación sentimental que duró un año y siete meses, es decir, hasta mayo de 2017.
Expresó que el ahora occiso decidió buscar un roomie –compañero de cuarto- porque viajaba mucho y quería que alguien se quedara al pendiente de su perro, un labrador negro de nombre «Lorenzo».
Añadió que la víctima y el ahora acusado se conocieron en el mismo gimnasio, donde al ahora acusado era instructor de box.
Mencionó que su novio se quejaba de que su compañero de cuarto era muy desordenado, lo que ocasionaba algunas molestias, pues aseguró que el ahora occiso era muy meticuloso en ese aspecto.
Por su parte, la novia del acusado señaló que éste es inocente y que se llevaba bien con la víctima, incluso ella le regaló una cama cuando se fue a vivir con el fotógrafo.
En la causa penal, se estableció que los hechos ocurrieron el 19 de diciembre de 2017 en la casa que habitaban en el fraccionamiento Jardines del Norte.
González Contreras recibió un fuerte golpe en el cráneo, que lo mató, y su asesino y compañero de cuarto desmembró el cuerpo para meterlo en una bolsa.
Antes trató de quemarlo, pero al no lograrlo, metió el cadáver en el auto del ahora occiso y lo fue a arrojar al basurero municipal de Chelem, donde fue encontrado el día 28 de diciembre en avanzado estado de descomposición.
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