Constantes robos a casa habitación en colonias y comisarías de Progreso y el incremento en la violencia de estos hechos, continúa generando temor entre los habitantes del puerto.
A pesar de los operativos de seguridad y vigilancia implementados en Progreso tanto en temporada vacacional como previo a la misma, los índices de hurtos a casa habitación han continuado registrándose en el sitio, según informaron vecinos de diversos puntos de la cabecera municipal y las comisarías, quienes señalan que, por desgracia, los ladrones han seguido con sus fechorías, siendo en muchos casos detenidos, pero desafortunadamente al considerarse este hecho como un delito menor, salen sin mayores complicaciones luego de unas horas, reincidiendo en el crimen.
Los colonos de la comunidad indicaron que tanto menores de edad como personas que ya cuentan con la mayoría de edad, viven de este tipo de actos, y tras las capturas ciudadanas suscitadas en fechas recientes, donde se logró atrapar a varios de estos individuos, siendo golpeados y luego entregados a la policía, los mismos criminales han aumentado su grado de violencia, situación que pone en riesgo a las familias del lugar, quienes además de ver en peligro sus bienes económicos, también temen por su integridad física.
Por desgracia, la situación ha permeado tanto entre los habitantes locales, como en las comunidades extranjeras e, incluso, entre los temporadistas, registrándose también asaltos a mano armada en calles del puerto y demás hechos que terminan por afectar la seguridad del municipio.
Se estima que de manera semanal en Progreso y sus comisarías se registran alrededor de 10 robos a casa habitación, de los cuales menos del 20 por ciento es reportado a la Policía debido, entre varios factores, a la falta de confianza de la población en el sistema de justicia, la desidia de los habitantes por lo tardado que resulta el levantamiento de una denuncia, así como situaciones donde los robos resultan mínimos y son difícilmente tomados en serio por las autoridades.
Del mismo modo, situaciones como el robo de motos han comenzado a surgir nuevamente, siendo hurtadas principalmente motocicletas estacionadas en lugares públicos, como el centro del municipio o, en su caso, sustraídas de predios en áreas poco concurridas y de baja vigilancia.
