Cómo estaría de borracho el propietario del Jeep, que terminó en una hondonada del Periférico.
Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Un Jeep del año acabó con la “nariz rota” al caer dentro de una zanja a un costado del Anillo Periférico. El chofer, al parecer en estado alcohólico, quiso evitar un retén pero terminó peor, aunque tuvo tiempo de huir, pues por más que los polis lo buscaron no apareció.
Alrededor de las 3 y media de la madrugada de ayer a unos metros de un retén de alcoholimetría instalado sobre Periférico, a la altura del kilómetro 19, una persona tripulaba la camioneta Jeep con placas YUZ-900-A y al percatarse del retén intentó escapar y maniobra de manera intempestiva hacia el costado derecho, lo que lo hizo que el vehículo cayera dentro de una zanja.
La defensa, fascia, parrilla, faros y guardalodos de la camioneta Jeep resultaron dañados y luego del percance el conductor la hizo de mago y desapareció.
Al lugar se acercaron los uniformados, pero sólo encontraron el carro abandonado. Se solicitó una grúa de la corporación policiaca para el traslado de la nave al corralón. Al parecer, el Jeep que manejaba por era de él.
