En un montón de fierros quemados quedó reducida una camioneta que recolectaba chatarra.
Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Resultó ser “transformer” un vehículo que ayer por la tarde jalaba por calles de la colonia Bojórquez.
Primero era una camioneta recolectora de chatarra, luego se convirtió en una bola de fuego, y finalmente quedó reducida a fierros quemados y humeantes. En otras palabras, la nave se incendió gacho y terminó en pérdida total.
Según se averiguó en el lugar, una camioneta encargada de recoger chatarra, con placas LB52510 y manejada por Miguel Angel Quijano sobre la calle 94 con 59 y 59-L de ese rumbo meridano, andaba en plena rodada cuando el guiador sintió un olor como a zorrillo, y la cosa se puso más fea cuando notó que debajo del tablero empezaba a salir humo, por lo cual se orilló a la derecha y bajó.
Al checar el asunto se dio cuenta de que había fuego por debajo de la nave que en cuestión de segundos avanzó y cubrió toda la cabina.
Vecinos del rumbo llamaron de inmediato a los servicios de emergencia, arribando los bomberos quienes con sus manguerotas soltaron chorros de agua hasta que acabaron con el incendio, pero ya había valido gorro la nave, pues quedó convertida en chatarra humeante, además de cenizas y plástico derretido. Ya ni modo.
Ojalá el conductor haya tenido seguro, para recibir cuando menos una lana por el vehículo. De lo contrario, sólo quedaba venderlo por kilos.
