Hasta esta tarde ya sumaban 85 las personas muertas luego de la explosión de un ducto perforado de Pemez en Tlahuelilpan, Hidalgo. La mayoría de ellos falleció en el sitio de los hechos, y las demás, durante su estancia en los hospitales a donde fueron trasladados.
En conferencia de prensa, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que continuará el apoyo a los familiares de las víctimas, según indica el portal López-Dóriga.
Aseguró el presidente que continuará la investigación de los hechos por parte de la Procuraduría de Justicia de Hidalgo y, en coordinación, con la fiscalía del Gobierno Federal y que será el procurador Alejandro Gertz Manero quien dará los avances en la investigación del caso.
Hasta el momento se sabe que son 85 las personas muertas por este caso, dos personas fueron dadas de alta de las clínicas a donde se les trasladó, y hay todavía 58 hospitalizados. Además, un niño fue trasladado a Galveston por la gravedad de sus quemaduras.
El Gobierno del estado de Hidalgo se encargará de los gastos médicos, funerarios y de reparación de daño para las familias afectadas.
Se agregó que 68 restos humanos se encontraron en la zona de los hechos, de los cuales nueve ya fueron identificados, y siete de éstos ya se entregaron a los familiares. Asimismo, se cuenta con 54 muestras genéticas y la identificación de las mismas podrán llevar días o meses.
Hasta el momento, se han abierto 65 carpetas de investigación por el caso.
