Por Jorge Moreno
El lunes pasado, durante la sección paranormal que tengo en el programa de radio “Frutería Espectacular” que se transmite en la estación “La Comadre 98.5 FM”, un radioescucha nos mandó un caso muy interesante, el cual estoy investigando.
Afirma que en los años setentas, dos jóvenes regresaban –cada quien en su moto- en plena madrugada a su pueblo, Dzidzantún, luego de haber acudido a un baile en un pueblo cercano (Yobaín); de pronto, vieron una enorme luz que emergía del cielo e iluminaba una brecha a un costado del camino, así como buena parte de la carretera.
Uno de ellos, movido por la curiosidad, se armó de valor y decidió acercarse para ver de qué se trataba. Su compañero se quedó a un costado de la carretera, pero al ver que pasaban los minutos y no regresaba, se fue aproximando poco a poco mientras le gritaba por su nombre; sin embargo, fue inútil, no lo vio por ningún lado y por más que lo llamó no recibió respuesta.
No había rastro ni de su moto (avanzó junto con ella en la brecha) ni de su ropa, sangre ni cualquier otra pista para dar con él. Con el paso de los días y las semanas, varias personas y las autoridades hicieron todo lo posible por encontrarlo, pero fue inútil.
En la actualidad, aquel joven compañero que fue testigo de todo, aún vive y tiene 72 años de edad; fue precisamente su nieto quien se comunicó con nosotros a la radio para contar esa historia.
Reacciones de internautas
El martes, a unas horas de escuchar el relato, lo publiqué en mi página de Facebook (Jorge Moreno Paranormal) y en cuestión de minutos ya tenía más de 150 “compartidas”, 800 reacciones y sobre todo decenas de comentarios, muchos de ellos de gente de Dzidzantun y municipios cercanos, quienes relataron algo en común: las luces extrañas en esa zona se ven de manera frecuente hasta el día de hoy.
Enigmas: experiencias paranormales con parientes fallecidos
Por ejemplo, Viridiana Cervantes Bernés dijo: “Sí lo creo, mi papá y su abuelo iban a cortar penca a las cuatro de la madrugada en Sinanché (sitio cercano a Yobaín), y una vez vieron una nave estacionada en medio del monte. Dice mi papá que tenía muchas luces muy fuertes y muy brillantes; estaban impactados. Esas cosas existen, sólo que mucha gente no habla de ellos por miedo”.
Por su parte, Frank Peraza comenta que su mamá también vio esas luces en aquella época de la misma forma, quitándose de la fiesta de ese pueblo, estaba con sus hermanos y les dio miedo, por lo que mejor se alejaron de ese sitio. “Esto me lo contó cuando yo era un niño”, relató.
Mariana Gil Baeza afirmó que la gente de ese poblado comenta que sí se han visto luces en esa carretera, que le ha pasado a varias personas desde hace mucho; de hecho, en eso coincidieron varios comentarios, que en ese tramo carretero las luces están “a la orden del día” desde los años ochentas y noventas.
¿Se trató de una abducción extraterrestre lo ocurrido en los años setentas? No hay mucha información al respecto, pero por el hecho de haber visto luces en el cielo, se podría pensar que esa teoría es la que cobra más fuerza; de no ser por ello, podría pensarse en que el “mal aire” o el viento del monte se llevó a ese adolescente.
De acuerdo con las crónicas de la época, el hecho de que no hubiera huellas de la moto ni de los pies de esa persona, descarta que hubiera sido un asesinato, rapto o secuestro; lo sorprendente del asunto es que, a medio siglo de distancia, ya nunca se supo de ese pobre hombre.
Cabe destacar que, de acuerdo con expertos en el tema, se sabe de muchos casos de personas que han sido abducidas y han vivido para contarlo; sin embargo, se cree que son muchos más los casos de personas que jamás regresan. Hoy en día, un porcentaje (aunque sea mínimo) de las personas que desaparecen y que se piensa se trata de rapto, secuestro, asesinato, “levantón” o que “huyeron con el novio o novia”, podría ser en realidad un caso de abducción.
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