Por Jorge Moreno
Existe una hora que causa mucho misterio a nivel mundial, algunas personas dicen que es la hora del “demonio” o del tiempo muerto, un momento en el que los espíritus malignos salen y nos visitan.
¿Qué tan de cierto hay al respecto? Y es que, desde hace años, mucha gente me ha platicado que se despierta de pronto a esa hora, permanentemente o de forma ocasional, y existe mucha confusión, ya que lo relacionan con fantasmas, con brujería, satanismo y hasta con hechiceros mayas.
Una de las características más comunes es que te acuestas a dormir de manera normal, sin padecer insomnio, y de pronto, aunque estés profundamente dormido, te despiertas, no por una pesadilla, ni por algún ruido que hayas escuchado en el exterior, te despiertas “de la nada”.
Y según se dice, una energía invisible hace que busques un reloj para ver la hora (aunque a veces por sentido común cuando alguien se despierta de madrugada busca ver qué hora es) Ahora bien, existe una confusión con la hora exacta, ya que mientras muchos piensan
que “la hroa del demonio son las tres de la madrugada en punto, otros señalan que es a las tres con siete minutos (el siete debido a la misticidad de ese número y su relación con los siete infiernos) y otra parte de gente afirma que la hora es, las 3:33 am (la mitad del 666).
Otra de las sensaciones que se presentan con mayor frecuencia a esta hora es “la parálisis del sueño“ (conocida popularmente como “subida del muerto”), aunque esta, es una situación médica no relacionada con los fantasmas.
¿Para qué el demonio nos busca a esa hora?
Se dice que cuando te despiertas en ese horario, es porque el maligno lleva varios minutos observándote, debido a que quiere poseer tu alma, y es tan fuerte su energía que aunque estés profundamente dormido, te despertarás debido a su mirada penetrante.
Algunas investigaciones dicen que en esta hora se producen muchas muertes, ya que en esa hora nuestro sistema inmunológico está más vulnerable y nuestra psique se encuentra alerta.
Para la ciencia el tiempo muerto y el hecho de que te despiertes en ese horario no es más que una representación de nuestro miedo colectivo a la oscuridad y que durante ese período nuestros sentidos se agudizan, ya que somos mucho más conscientes de nuestro entorno y estamos en guardia, en busca de peligros potenciales.
Sea por el motivo que sea, lo único cierto es que esto le da mucho miedo a la gente a la cual le ocurren estas situaciones, sobre todo a quienes de manera frecuente les pasa y de manera más que puntual con ese horario.
De hecho, un experimento que vino a romper con el escepticismo de la ciencia, es que en una ocasión, la esposa de una persona a la cual le ocurría esto, adelantó desde la mañana todos los relojes de la casa, y cuando le pasó esto en la madrugada a su marido, el reloj decía las cuatro con treinta y tres minutos, pero en realidad era las tres treinta y tres.
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