Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Un ruquito que vivía en una casa de huéspedes, propiedad de otra señora de la tercera edad, fue encontrado sin vida en el cuarto que alquilaba. Por poco y la Parca hace ayer el 2×1, pues la mujer que encontró el cadáver se llevó el susto de su vida.
Le contamos que doña Bertha María Salgado, de 78 años de edad, da cuartos rentados en su predio de la calle 75 número 563-A por 74 del Centro Histórico de la ciudad, y hace 10 días le dio uno a don Noé Góngora Navarrete de aproximadamente 80 años.
Según la septuagenaria, su huésped era muy callado y casi todo el día se la pasaba en la calle. Lo único que le llamó la atención es que lo veía un poco enfermo, pero nunca le preguntó qué tenía.
Doña Bertha María dijo que la última vez que vio a don Noé fue el pasado lunes, y como siempre entraba y salía de su cuarto, le preocupó que ayer no hubiera salido para nada, por lo que fue a verlo.
Grande fue el susto que se llevó la mujer, pues ayer que fue a verlo en horas de la tarde para ver si necesitaba algo, lo encontró tirado bocabajo en el piso.
