Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Luego de perder una pierna, un don no pudo soportar vivir así y se ahorcó la tarde de ayer en su casa ubicada en la colonia Emilia Zapata Sur. Al parecer, al señor le habían diagnosticado diabetes varios meses atrás y como parte del tratamiento le habían prohibido consumir bebidas embriagantes, pero nomás no podía evitarlo.
El señor vivía con su familia en lote dos de la calle 153 por 84 de la citada colonia, y según comentaron los vecinos le encantaba empinar el codo muy seguido y hace unos meses los doctores le diagnosticaron diabetes, por lo que un tiempo después le amputaron una de las piernas, pues tuvo problemas con la circulación y la extremidad comenzó a engangrenarse, sobre todo porque no se cuidaba.
Por lo que se supo el señor tenía un gran el amor por el alcohol, tanto que lo puso por encima de su salud, pues nunca dejó de chupar; es más, la situación se agravó luego de que le cortaron la pierna porque se deprimió y para tratar de olvidarse de su realidad empinaba el codo a todas horas.
Durante las primeras horas de ayer, sus familiares salieron un momento y lo dejaron solo, y aprovechó ese tiempo para colgarse.
Cuando sus parientes regresaron lo encontraron pendiendo de una soga, y aunque de inmediato lo descolgaron y llamaron al 911, cuando los paramédicos llegaron ya nada pudieron hacer, así que fueron los trabajadores del Semefo, quienes se encargaron de los trámites de ley.
