Trágico final tuvo el señor Zoilo P. P., de 80 años de edad, quien falleció víctima de un incendio forestal que llegó hasta su rancho, pues al pretender apagarlo fue devorado por las llamas.
La tragedia ocurrió a unos 4 kilómetros de la vera de la carretera federal Kinchil-Celestún, a la altura del kilómetro 66.
Según se averiguó, su hijo Wilberth dijo a las autoridades que todavía en la noche del lunes pasado había dejado en su casa a su papá, e incluso el ahora occiso fue invitado para ir al puerto de Celestún, pero no quiso, pidió que lo dejaran en su rancho «Kambul». Pero por la tarde de este martes, Wilberth regresaría por él.
Fue entonces que al ingresar a bordo de su camioneta de redilas alrededor de las 3 de la tarde y estar buscando a su padre, Wilberth se topó con la penosa escena al verlo boca abajo inerte, con el cuerpo quemado. De inmediato acudió hasta la cabecera municipal para pedir ayuda.
Al final, paramédicos de la ambulancia 21-G de la Secretaría de Seguridad Pública se metieron monte adentro, pero era demasiado tarde, pues el octogenario hace rato que había fallecido. Asimismo ingresaron agentes de la Policía Municipal kinchilense.
Datos preliminares revelan que el anciano estaba durmiendo en paños menores debido al sofocante calor en esta zona, cuando posiblemente en la madrugada se levantó por la humareda, tomó una cubeta y jícara para intentar apagar la quemazón. Sin embargo, debido a su avanzada edad, no controló con rapidez las llamas que ya avanzaban y fue presa de las lenguas de fuego.
Por último, las autoridades seguían en el lugar de la tragedia en espera del personal de la Fiscalía General del Estado y Servicio Médico Forense para el levantamiento del cadáver.
