Para dejar así de abollado el Tsuru tuvo que estar bueno el mameyazo.
Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Adolorido y tirado en la calle acabó un motociclista la mañana del lunes, cuando el conductor de un Tsuru se le atravesó en el camino y ocasionó que se estampara en la parte trasera de su nave. Luego de sobarse un rato la humanidad, el chavo se levantó y llegó a un acuerdo con el culpable del accidente.
Lo que ocurrió fue que el joven iba en su moto con placas KWN4S sobre la calle 64 con dirección de sur a norte, pero no iba en el carril de la derecha como marca el reglamento de tránsito, sino en el izquierdo (lo cual no justifica el agandaye del otro conductor) y al llegar al cruce con la 91 se le atravesó un carro.
El guiador del Tsuru con matrícula ZBX659A, también manejaba sobre la 64 pero al acercarse a la 91 se acordó que tenía que doblar, así que invadió el carril izquierdo con intención de cambiar de rumbo creyendo que el motoneto se detendría, pero éste no se dio cuenta de la maniobra.
Cuando se le metió en el camino, el motociclista frenó pero no alcanzó a detenerse del todo y se aporreó en la parte trasera del carro. El chavo cayó adolorido, pero luego de un rato y de que los paramédicos lo revisaran, se levantó sobándose para llegar a un acuerdo con el del automóvil.
