El Buen Fin tiene de todo, desde ofertas hasta milagros: una persona dejó su Tsuru esta mañana estacionado en el centro de Ticul para realizar unas compras, pero cuando regresó se percató de que amantes de lo ajeno se llevaron la nave.
Sin embargo, una hora después la Policía Municipal la encontró en la calle 9 por 28, por el rumbo del Cetis 19, donde los agentes acudieron con el afectado, quien identificó el vehículo.
El quejoso llegó a Ticul, procedente del municipio de Santa Elena, y junto con su familia se dirigió a realizar unas compras para aprovechar El Buen Fin, de modo que alrededor de las 11 de la mañana dejó estacionado su automóvil Tsuru.
Cuando regresó por el vehículo descubrió que ya ni estaba donde lo dejó estacionado y como primero pensó que se lo pudo haber llevado una grúa de la Policía Municipal, pidió ayuda a un agente, quien confirmó que eso no ocurrió. Lo peor es que el afectado no se acordaba de las placas de su carro, de modo que los policías municipales solo dieron la alerta con las características físicas de la unidad para tratar de localizarlo hasta que se tuvo éxito.
