Un hombre en Estados Unidos pidió comida mediante la aplicación DoorDash, sin saber lo que le esperaba.
Una vez que llegó la repartidora con la comida a la casa del cliente, al saber que le darían 8 dólares (unos 160 pesos de propina) se indignó y comenzó a debatir el pago.
Los hechos quedaron grabados en un video captado por una cámara que se encontraba afuera del domicilio del hombre. De esta manera, es posible ver a la mujer en la entrada del hogar.
Según ella, había recorrido unos 40 minutos manejando para poder llevar el pedido, pero el cliente le respondió que conocía la sucursal a donde llamó y que estaba a menos de 20 minutos de su hogar, lo cual fue negado por la repartidora.
“Creo que necesita ajustar su propina», dijo la mujer, pero al cliente respondió: «¿Qué diablos estás buscando?”. Al escuchar esto, ella tomó el pedido y se fue.
Tras esta polémica, la plataforma emitió un comunicado al respecto en el que señalaron que no son tolerantes al comportamiento inapropiado, por lo que la mujer fue dada de baja de la aplicación de repartidores.
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