Como cada año, los habitantes de la comisaría de Citilcum y, en especial, los socios de don Nicolás Can, comenzaron la noche del sábado los preparativos en honor al Padre Eterno, festividad que se realiza del 23 al 25 de marzo.
En punto de las 9 de la noche, los “socios” comenzaron con la molienda del maíz que se traducirá en la elaboración de aproximadamente 7 mil arepas que se repartirán a los visitantes que lleguen el próximo domingo al domicilio Nicolás, que se encuentra rumbo al municipio de Tekantó.
Desde anoche, el ir y venir de socios y voluntarios para esta titánica tarea se observó en el improvisado ‘macán’ (estructura de madera con techo de tajonal) que sirve de sombra y albergue a la gente que muele y tortea las ricas arepas que son llevadas para su cocimiento a un horno de la comunidad.
El sonido de los voladores hizo “temblar al cielo” –como dicen por el rumbo- y fue la señal que marcó el inicio de las labores y también será la que indique que terminaron de hacer las arepas; se prevé que ocurra como a las 8 de la noche de ayer domingo, casi 24 horas después de haber comenzado.
Los socios, en especial Don Nicolás Can, se encuentran entusiasmados de recibir a los visitantes el próximo domingo 24 de marzo.
