Como parte de una tradición anual músicos de Yucatán celebraron a su patrona Santa Cecilia en la Catedral de Mérida, esta viernes 22 de noviembre en el Centro de Mérida.
Desde muy temprana hora, integrantes de la Banda de Música del Estado dedicaron sus mejores acordes a la Santa patrona en el atrio de la Catedral y posteriormente integrantes de la Marimba Lira de Pichucalco tocaron las mañanitas así como otras rolas conocidas.
En una entrevista con el exdirigente del Sindicato Único de Filarmónicos de Yucatán, Miguel Ángel Martínez Ancona, indicó que la misa se realizaría a las 11:00 horas en donde un mariachi integrado por 15 músicos entonaría algunas canciones antes y después de la ceremonia.
Posteriormente, está programado una procesión rumbo al local de ferrocarrileros acompañado de más de 30 músicos.
Ya en el lugar se celebrará una fiesta infantil para los hijos de los socios, posteriormente iniciará la pachanga para los agremiados y sus familias con harta música y comida hasta que el cuerpo aguante.
El dato:
- El Día del Músico, es una fecha creada por Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), con el fin de ofrecer un merecido tributo a los músicos que han contribuido con el desarrollo de la música así como en la innovación de sonidos y géneros.
Músicos de Yucatán celebran a Santa Cecilia en la Catedral de #Mérida pic.twitter.com/QO85jpxo8t
— De Peso Yucatán (@depesoyuc) November 22, 2019
Historia de Santa Cecilia
Según una antigua tradición, la santa pertenecía a una de las principales familias de Roma, que acostumbraba vestir una túnica de tela muy áspera y que había consagrado a Dios su virginidad.
Sus padres la comprometieron en matrimonio con un joven llamado Valeriano, pero Cecilia le dijo a éste que ella había hecho voto de virginidad y que si él quería ver al ángel de Dios debía hacerse cristiano.
Años más tarde, Cecilia fue arrestada y se le exigió renunciar a la religión de Cristo. Ella declaró que prefería la muerte antes que renegar de la verdadera religión.
Entonces fue llevada junto a un horno caliente para tratar de sofocarle con los terribles gases que salían de allí, pero en vez de asfixiarse ella cantaba gozosa (quizás por eso la han nombrado patrona de los músicos).
Visto que con este martirio no podían acabar con ella, el cruel Almaquio mandó que le cortaran la cabeza.
En 1599 permitieron al escultor Maderna ver el cuerpo incorrupto de la santa y él fabricó una estatua en mármol de ella, la que se conserva en la iglesia de Santa Cecilia en Roma.
