Las protestas que se están viviendo en Chile no son las únicas que se han tomado la prensa internacional por estos días. Diversos lugares del mundo han visto cómo los conflictos sociales y políticos se han tomado las calles, aunque parece ser que las manifestaciones alrededor del globo tienen algo en común: el Joker.
La cinta protagonizada por Joaquin Phoenix no tan sólo se llenó de elogios por parte de la crítica y alcanzó récords históricos en taquilla, sino que también se convirtió en un nuevo símbolo. Y es que el villano de Gotham ha sido utilizado como un sinónimo de protesta en muchos países, pues los manifestantes han salido a las calles caracterizados de este clásico personaje.
Some people in Lebanon are protesting corruption and the political elite in «Joker» make-up: pic.twitter.com/0aOglCqf2B
— AJ+ (@ajplus) October 23, 2019
En lugares de Hong Kong, Líbano, Ecuador y Chile se ha podido ver la sonrisa de Joker. Máscaras o simplemente pinturas de rostro han sido utilizadas por los manifestantes que decidieron salir a protestar por los problemas que aquejan a sus países. Las imágenes de estas personas que se inspiraron en el personaje han circulado por redes sociales.
Pero la utilización del Joker no ha quedado sólo en su imagen. A inicios de las manifestaciones chilenas, la imagen de la reconocida estatua de Los Leones comenzó a circular por internet con una particularidad: tenía escrito «We are all clowns».
Las razones de elegir a Joker como símbolo de protesta son muchas. Según señala Nathaniel Flakin, del periódico Left Voice, la película «cumple un papel enormemente progresivo al enfatizar la línea que divide a las élites liberales de los trabajadores oprimidos y enojados. Esto puede ayudar a explicar por qué la recepción del público ´hasta ahora ha sido mucho, mucho más positiva´ que la respuesta crítica”.
Según lo dicho por Tamara Tenenbaum en Info Bae, no hay un vínculo casual entre la película y las diversas manifestaciones, pero sí en la idea del «pobre resentido», concepto despectivo con el que las clases altas se refieren a quienes protestan.
«Yo diría que ese resentimiento es comprensible, lógico e incluso sano frente a una sociedad en donde los ricos son cada vez más ricos. Algo insostenible. El villano es malo porque ha sufrido en carne propia un sistema de exclusión y en crisis política», señala Tenenbaum. La autora también agrega que son esas las razones por las que la película resuena mucho entre quienes decidieron manifestarse en Ecuador y Chile.
Michael Moore también ha tenido palabras para describir a Joker y su rol de icono protestante. El ganador del Oscar escribió en su Facebook: «¿Qué pasa si un día los desposeídos deciden rebelarse? (…) La gente se preocupa de que esta película sea demasiado violenta para ellos. ¿En serio? ¿Considerando todo por lo que estamos pasando en la vida real?”.
Pero lo de Joker no es algo que nunca se haya visto. Casos parecidos a los que se viven en la actualidad con este villano ya habían ocurrido con otros personajes, como por ejemplo con Guy Fawkes de V for Vendetta. A él también se suman las máscaras que usa la organización Anonymous, las que también fueron replicadas en protestas.
El caso más reciente de apropiación de personajes presentes en la cultura popular fue «La Casa de Papel». La serie española ha sido inspiración para que manifestantes en diversos lugares del mundo decidan usar overoles rojos y máscaras de Dalí.
(Info: futuro.cl/Fotos: The Associated Press, @ajplus, @AnotherCamilo)
