Enigmas: ¿En que se parece un Fauno romano y Huaychivo maya?

InicioEspecialesEnigmas: ¿En que se parece un Fauno romano y Huaychivo maya?

Enigmas: Los huaychivos mayas tienen bastante en común con los faunos de la cultura europea

Por Jorge Moreno
El fauno es un ser mitológico del bosque, mitad humano, mitad cabra (humano de la cabeza a la cintura, con presencia de cuernos; en la tradición romana es una de las divinidades más populares y antiguas entre los “di indigetes” (dioses indígenas).

Fauno era el dios de los campos y los bosques, protector de los rebaños, a los que hacía más fecundos y los defendía de los ataques de las alimañas. En otro aspecto, fue considerado un dios profético que revelaba el porvenir por medio de voces que se oían en los bosques o a través de sueños. Algunas veces se le consideraba como el responsable de las pesadillas nocturnas de la gente que obraba mal o que tenía malos sentimientos.

Se pensaba que a veces podía mandar maleficios contra los campesinos que eran abusivos, por lo que estos se frotaban el cuerpo con ciertas hierbas de protección.

Por lo anterior, Fauno fue adorado en dos roles diferentes: como el dios de los campos y los pastores, y como una divinidad oracular y profética. Con el paso del tiempo vino a tener un nuevo rol en la época moderna, pues a mediados del siglo pasado, algunos hechiceros de magia blanca adoptaron esta imagen como protección de embrujos a través de fotos.

Hasta la fecha se dice que si pones una foto de tu rostro cerca de una escultura de un fauno ritualizado, éste te protegerá de las malas vibras, envidias y cosas negativas que pudieras cargar en la calle, y más si acostumbras a andar en el monte, bosque o selva.

En varias ciudades de Italia, España y Francia, entre otros países, se usan pequeñas esculturas a manera de protección, y quien las compra pone su foto junto al fauno, pues además se dice que ayuda en la fertilidad y atracción sexual tanto en hombres como en mujeres.

En el título de este reportaje, mencionamos también al Huaychivo, esto porque vemos una similitud entre estos dos seres de culturas diferentes, ya que el Huaychivo, también se trata de un hombre que se convierte en cabra o chivo, aunque en este caso la conversión es total.

La similitud mayor es que los huayes mayas que se convertían en chivo, se dice que también protegían a las personas, no con fotos pero sí con objetos personales, de manera que quienes deseaban no cargar ningún mal aire o mala vibra en el campo o donde anden, debían llevar una prenda o artículo personal al hechicero, quien lo dejaba en un rincón.

Tal vez te pueda interesar:

Enigmas: Esto es lo que no sabías sobre los panteones
- Publicidad -

LO MÁS LEÍDO