Bajo un cielo nublado y lloviznas se vive el Viernes Santo en diversos puntos de la entidad, en donde las diferentes representaciones de la Pasión de Cristo mantienen con la fe encendida a miles de feligreses y religiosos yucatecos.
En Acanceh el cielo nublado no impidió la llegada de cientos de visitantes, quienes han acudido a presenciar una de las representaciones más populares de Yucatán.
En los alrededores se puede observar la presencia de vendedores de paraguas, ya que a diferencia de años anteriores, en esta ocasión fueron las lloviznas un elemento protagónico de las escenas y no el intenso calor que caracteriza a estas tierras en esta época.
Otro de los viacrucis tradicionales en Yucatán es el infantil, que año con año se realiza en el barrio de San Cristóbal.
En este emblemático lugar del Centro de Mérida, la Pasión es representada por los niños del catecismo, lo que llama la atención de los colonos y visitantes que se reúnen para avivar su fe.
En Pacabtún, otro punto emblemático para este evento religioso, se ha podido apreciar una cantidad de jóvenes que durante muchas semanas se prepararon para este día.
Ahí el Cristo fue custodiado sobre la calle 21 hasta llegar a su Crucifixión en la iglesia de Cristo Rey.
Igualmente el fraccionamiento Juan Pablo II fue sitio de concurrencia para los fieles, quienes con mucho fervor acompañaron a Cristo hasta su destino en la cruz.
En la parroquia de María Inmaculada los feligreses caminaron con mucho respeto acompañando a la Cruz, en el fraccionamiento Campestre.
Sin duda este Viernes Santo sigue representando una jornada de fe y devoción para los fieles de Yucatán.
(Fotos: Adan Kent, Oscar Chan, José Acosta y Jorge Acosta)
