Hace un par de semanas el país se conmocionó al darse a conocer que una niña de 6 años había perdido la vida al quedar prensada en un elevador del Hospital General de Zona (HGZ) No. 18 en Playa del Carmen, Quintana Roo, cuando estaba siendo trasladada al área de hospitalización por Víctor Flores, camillero de la institución.
Es ahora que el Víctor da una declaración por primera a los medios de comunicación y fue entrevistado por Danielle Dithurbide.
Al ser cuestionado por Dithurbide sobre las instalaciones del hospital, Victor indicó que él empezó a trabajar ahí el 1 de septiembre de 2012, y desde que entró los elevadores no funcionaban bien.
Explicó que las puertas se cerraban y abrián sin que nadie presionara los botones, además de que ya se había quedado atrapado dos ocaciones previas en los elevadores.
Indicó que en una de esas veces él tuvo que abrir las puertas porque el paciente que llevaba comenzó a sentirse mal por quedarse atrapados.
Indicó que todos los elevadores del hospital presentaban fallas, no solo en el que la niña perdió la vida.
Explicó que el hospital no podían hacer nada para en relación a los elevadores porque sino se perdía la garantía y se tenían que esperar que la empresa encargada del mantenimiento llegara.
Durante la entrevista, Víctor declaró que se siente desprotegido y traicionado por el sindicato que lo representa.
Indicó que tras los hechos, le pidieron llenara el reporte de la Policía Municipal, pero él se negó al sentirse afectado emocional y fisícamente, sin embargo, le dijeron que lo tenía que hacer debido al protocolo y que no tenía ningún poder judicial.
«Yo sabía que era una situación ilegal porque no estaba en condiciones emocionles ni de salud para hacer algo así».
Tras esto, le indicaron que estaba detenido por su presunta responsabilidad en la muerte de la niña, por lo que él le reclamó al secretario del sindicato de permitir algo así.
«Sentí que era un chivo expiatorio de la Fiscalía, de las mismas autoridades que me representaban».
Indicó que a diferencia de su sindicato, el IMSS lo ha apoyado.
Como se recordará, dos días después de los hechos, las autoridades determinaron que Víctor no tendía responsabilidad penal en el acontecimiento, por lo que se le dejó en libertad.
