En Chihuahua, hombres armados asesinaron dentro de una iglesia a dos sacerdotes jesuitas que intentaron evitar que aquéllos dieran fin a un sujeto al que perseguían.
Luego del triple crimen, los pistoleros, presuntos integrantes del crimen organizado, se llevaron los cuerpos de los sacerdotes, a pesar de que un tercer religioso les pidió que no lo hicieran.
Los sacerdotes jesuitas asesinados fueron identificados como Javier Campos Morales y Joaquín Mora Salazar, y los hechos se dieron dentro de un templo en el pueblo de Cerocahui, en Chihuahua.
Al respecto, el provincial de la Compañía de Jesús en México, Luis Gerardo Moro, dio a conocer que el crimen fue porque los religiosos intentaron proteger a un hombre que entró a la iglesia buscando ayuda.
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Sin embargo, los hombres armados que iban tras él también ingresaron, y dispararon contra la persona a quien perseguían y luego hicieron lo mismo contra los sacerdotes. Los tres murieron, y los intrusos empezaron a llevarse los cuerpos.
“Hay un tercer sacerdote que sale tras escuchar los balazos y es el que reclama los cuerpos de los padres. La persona que agrede responde que se los tienen que llevar, entra otro grupo de personas y se retiran”, dijo Luis Gerardo Moro.
Se contactó a las autoridades locales y federales, e incluso con al secretario de Gobierno, Adán Augusto López, quienes indicaron que un convoy realizará las primeras investigaciones.
El provincial condenó los hechos violentos en el pueblo de Cerocahui y en todo el país, y agregó que hasta el momento no han recibido amenazas por posibles represalias.
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