Por comer un riquísimo pero peligroso frijol con puerco un chavito se intoxicó y terminó en una fría cama del Hospital General de Cancún, este miércoles por la tarde.
La historia de los hechos inició en una vivienda de la supermanzana 94 de Cancún, donde su mamá le sirvió al muchacho un riquísimo frijol con puerco, hasta con su cilantro, limoncito y tortillitas calientes.
Ante lo rico del platillo, el chavo se agasajó con dos platos bien llenos, pero al terminar, sintió ganas de ‘guacarear’ e inmediatamente mareos.
La mamá, al ver que el niño se puso mal, rápidamente llamó a la Cruz Roja, cuyos paramédicos llegaron y de volada trasladaron al chamaco, quien no paraba de llorar.
Ya en el hospital, el menor fue atendido por los doctores, quienes informaron que el menor se había intoxicado. Posteriomente se le brindó un tratamiento y lo mandaron a reposar a su casa.
