El chofer del taxi le quiso echar la culpa al del Chevy, pero nel pastel, él fue el causante del trancazo.
Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Tremendo susto se llevaron la tarde del sábado dos chavos que, al transitar sobre la avenida Mérida 2000 a bordo de un Chevy placas YYR-187-B, los pobres fueron víctimas de un taxista atarantado que en el cruce de la calle 77 del fraccionamiento Mulsay se atravesó en su andar y ocasionó despapaye y medio.
Puro daño material, por fortuna, dejó lo sucedido en el lugar. Un taxista de quién sabe qué agrupación, con placas 32-68-YSD, fue el causante de lo sucedido.
Aunque el mentecato intentó responsabilizar al guiador del Chevy, al final su agente de seguros le explicó lo sucedido y no le quedó de otra más que aceptar que la había regado.
Ambas naves eran guiadas sobre la avenida, con dirección al sur, pero en el cruce con la 77, el taxista, que conducía sobre el carril derecho, intentó tomar un retorno, invadiendo el carril izquierdo.
Precisamente sobre el carril izquierdo jalaba el Chevy, de manera que éste le pegó leve rayón al taxi, para después subirse al espacio divisorio de dicha avenida para terminar finalmente en las áreas verdes.
Por el trancazo, el taxi casi se queda sin guardalodos y defensa delantera, en tanto que el Chevy sufrió daños en su costado derecho delantero y su defensa quedó casi desprendida.
Lo sucedido no pasó a mayores y los seguros solucionaron todo en el lugar. Curiosamente se supo que el mentado taxi, siendo un vehículo de servicio público, no contaba con seguro de cobertura amplia, sólo tenía seguro por daños a terceros.
