El poste de alumbrado detuvo la marcha del Golf conducido por un ebrio la mañana de ayer.
Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Después de pasarla a todo dar en una fiesta, el conductor de un Golf acabó en el hospital luego de estrellar su carrito en el Anillo Periférico.
Le contamos que esta persona, al parecer trasnochada y con mucho alcohol en el cerebro, se subió a su carro placas YWR-304-A y empezó a manejar en Periférico de manera errática y a exceso de velocidad.
Al llegar a la altura del kilómetro 39, cuando transitaba de norte a sur sobre el carril de alta velocidad, perdió el control de su vehículo, se salió de la cinta de asfalto y cayó dentro de la hondonada que divide los carriles.
Pero el relajo no acabó ahí, el carrito avanzó varios metros entre la maleza y arbolitos y al salir al carril contrario se estampó contra la base de un poste de alumbrado público. ¿Queréis más?
Producto de todo el despapaye el conductor quedó lesionado, por lo que después de prestarle los primeros auxilios fue trasladado a un hospital.
Por el fuerte porrazo el carrito quedó con el parabrisas roto y la tapa del motor levantada.
