Por querer llevarse por la fuerza a su hija de dos años, Marcelino «N» fue condenado a 3 años de prisión, al aceptar que armó un zafarrancho, con jalones, golpes y empujones, que tuvo que controlar la Policía Municipal de Chichimilá para evitar que el sujeto sustrajera a la menor.
Este papá fue procesado por la juez de control de Valladolid, Claudia Crisol Antonio Mayor, para que responda por el delito de violencia familiar que denunció la señora H.R.M.Ch.
Luego, debido a que las partes acordaron concluir de manera anticipada el proceso penal, se sometió el caso a un juicio abreviado. Al aceptar su culpa, Marcelino también fue amonestado públicamente y se suspendió sus derechos políticos, para luego imponerle otras sanciones.
En la denuncia, se asentó que la pareja estaba casada por la vía civil desde hace 11 años y procrearon 3 hijos, sin embargo, debido a agresiones constantes, la víctima interpuso una denuncia en contra de su esposo y se separó de él.
Es por eso que la mujer estableció su domicilio en la casa de sus padres en la localidad de Chichimilá.
Los hechos
La señora, en noviembre de 2023, encontrándose a las puertas del domicilio junto con su hermana, fue avisada por uno de sus hijos que le dijo que se estaban llevando a su hermanita de 2 años.
Es por eso que de inmediato ingresó a su cuarto y vio a Marcelino con la menor. Éste, al percatarse de la víctima, dejó a su hija para jalar a la mujer al interior de la habitación y comenzó a amenazarla y sujetarla fuerte.
Tras la llegada de los elementos de la Policía Municipal y del hermano de la víctima, el sujeto cargó a su hija de 2 años y provocó jalones, agresiones y ataques entre la mujer, el sujeto, el hermano y la Policía, resultando con lesiones la menor y la quejosa.