Seguramente, don Serapio Alonzo se sintió mal y por eso buscó el refugio de un arbolito en el parque, de donde ya no se levantó más.
Redacción/De Peso
UMÁN, Yucatán.- Los vecinos creyeron que se había sentado un rato a descansar, aprovechando la sombra de uno de los pocos árboles frondosos del parque, pero después de un rato se dieron cuenta que el señor de la tercera edad no se movía, así que se acercaron a verlo y se llevaron la terrible sorpresa de que estaba bien muerto.
Al parecer don Serapio A. T. se tomó un momento en su chamba para ir a su casa a comer, pero al caminar sobre la calle 40 entre 51 y 51-A del fraccionamiento Piedra de Agua, ubicado en el municipio de Umán, comenzó a sentirse mal, así que decidió hacer una parada para recobrar el aliento, por lo que se sentó junto a uno de los árboles del parque.
Pero todo indica que en ese momento tuvo un infarto fulminante y que perdió la vida en unos pocos minutos. Los vecinos creyeron que estaba sentado porque don Serapio quedó agachado y con los brazos enganchados entre las ramas del árbol.
Cuando se dieron cuenta que ya no respiraba, de inmediato llamaron a la policía, y cuando llegaron los uniformados avisaron a la Fiscalía General del Estado, cuyos elementos llegaron un par de horas después, y se encargaron de levantar el cuerpo sin vida y realizar los trámites de ley.
