Por temor a que les suceda lo mismo que a los usuarios de Cancún, ayer se formaron largas filas de personas que acudieron a retirar sus bienes que tenían resguardadas en First National Security de Prolongación Paseo de Montejo.
Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- La psicosis generada por las presuntas arbitrariedades cometidas por la Seido al confiscar mil 500 cajas de seguridad en la sucursal de Cancún, cientos de usuarios de First National Security realizaron largas filas para sacar sus bienes que tienen en esa empresa y en otras dos en la capital yucateca, lo que podría generar un problema a nivel nacional debido a que se trata de franquicias que operan en todo el país.
Además de la afectación a First National Security, ubicada en Prolongación de Paseo de Montejo, hubo un intenso movimiento en las empresas de renta de cajas de seguridad Stonewall –situada en la avenida José Díaz Bolio por 21 de la colonia México Oriente, y Cisty Safe en la calle 18 por 21 de la colonia México. Todas ubicadas en Mérida.
“El retiro masivo de bienes como alhajas de gran valor pueden propiciar un elevado incremento en los robos a casa habitación, pues los ladrones buscarán hacerse de esos preciados objetos, que antes estaban resguardados en cajas de seguridad”, señalaron fuentes cercanas a esta empresa.
El viernes pasado elementos de la Seido, apoyados por la Policía Federal, el Ejército y la Marina, realizó el decomiso de mil 500 cajas de seguridad de First National Security en Cancún, sin mostrar una orden de cateo, así como también destruyeron las bóvedas en donde estaban los recipientes.
El domingo decenas de usuarios se presentaron a la franquicia de esa empresa en Mérida para retirar sus objetos de valor y documentos de las cajas de seguridad que rentaban; sin embargo, ayer se intensificó para retirar los objetos, documentos y bienes de valor que estaban en First National Security.
La gente llegaba para sacar sus cosas del lugar con bolsas, mochilas, maletas o portafolios, lo que hizo que se formaran largas filas, motivados por la psicosis de que les fueran aseguradas por la PGR, sin motivo aparente.
Por otra parte, en la Cámara de Diputados, el legislador quintanarroense José Luis Toledo denunció las irregularidades en el decomiso de las mil 500 cajas de seguridad en Cancún.
El 9 de octubre del año en curso, a las dos de la madrugada, la Policía llamó al representante legal de First National Security en Cancún, Santiago Ancona Teigell, para avisarle que se dispararon las alarmas del negocio.
Ancona Teigell se presentó al lugar y al querer entrar, agentes de la Seido, Marina, Ejército y la Policía Federal, quienes dijeron que se trataba de una orden de cateo, pero no presentaron ningún documento, se llevaron todas las computadoras con la lista de las mil quinientas personas que tienen sus cajas ahí.
El afectado contrató a unos abogados que se fueron a México y se presentaron en la Seido para que les muestren el expediente y sepan de qué se le acusa y qué están buscando. Les negaron el acceso al expediente y no les dieron ninguna explicación.
Este negocio tiene 26 años, renta las cajas a personas que van a guardar lo más querido y valioso para ellos. Cualquier persona puede llegar con un maletín, rentar una caja y meter el contenido de este, sin que se sepa lo que guarda.
La Seido, Marina y PGR, ya comenzaron a violar (destrozar) las cajas de seguridad de estas mil quinientas personas y el contenido lo están vaciando en bolsas de plástico negras, para subirlas a un camión y llevárselas a México, sin que esté presente un notario que dé fe de lo que hay en las cajas. Este actuar de las autoridades es anti-constitucional, ilegal y arbitrario. Vulnera todos los derechos de los clientes y su privacidad.
Hay mil quinientas personas en total indefensión, porque la Seido les dijo que los que quieran ir a México a recoger sus pertenencias tienen que mostrar facturas de lo que hay en su caja.