Después de que por su imprudencia se destruyó esta camioneta, al conductor de un camión cisterna le salió lo gallina y se fue a esconder a la empresa donde trabaja “Asfaltos y Emulsiones Peninsulares”.
Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Casi se convierte en jalea el frente de una camioneta Hilux que tronó gruesísimo contra una pipa que se le metió a lo bestia en el camino, a la altura del kilómetro 7 de la carretera que va de Mérida a Motul.
Pero lo más chistoso es que el guiador de la nave grandota, en vez de enfrentar las consecuencias de sus actos, se metió de volada a la empresa que está enfrente del sitio de los hechos, llamada “Asfaltos y Emulsiones Peninsulares”, a donde pertenece el vehículo. Bien gallina el infeliz.
El operador de la nave pesada fue identificado como José de Jesús May. Circulaba sobre esa carretera, y al llegar al kilómetro mencionado, donde está dicha empresa, dio vuelta a la izquierda para entrar a la misma, pero al hacerlo le cerró el paso a la camioneta Hilux de placas YP6746B, con Víctor Poot al volante quien iba en el carril contiguo hacia Motul. Fue inevitable que la camioneta se reventara contra la unidad pesada, y haciéndose auténtica papilla del frente.
Milagrosamente Víctor Poot no salió lastimado, y al bajar del vehículo para tratar de hablar con el operador de la pipa, éste prefirió acelerar y meterse a la empresa de “Asfaltos y Emulsiones Pueninsulares”, dejándolo a él abandonado. Llegaron agentes de la SSP y de la Federal a tomar nota de los hechos, y tuvieron que batallar bastante para que el cobarde de la pipa saliera con todo y la nave a dar la cara por la burrada que hizo. Ya fue cosa de llamar a las aseguradoras para que se arreglara el pago de todo.
