MÉRIDA, Yuc.- El Tribunal Segundo de Juicio Oral halló culpable a Carlos Alexis R.G., de 19 años de edad, de participar en el asesinato de José Armando A.C. para robarle una camioneta, hechos ocurridos en enero de 2019.
El cadáver de la víctima fue arrojado en un terreno baldío en la colonia El Porvenir, en el poniente de Mérida.
Los integrantes de este Tribunal, Verónica Burgos Pérez, Sergio Marfil Gómez y María del Socorro Tamayo Aranda, emitieron por unanimidad esta resolución y fijaron para este jueves 20 de febrero la celebración de la audiencia para la individualización de las sanciones que se impondrán al ahora sentenciado.
El fallo condenatorio fue por los delitos de homicidio calificado y robo de vehículo automotor, el acusado -de 19 años- podría ser sentenciado a 52 años de prisión si se le imponen las máximas por ambos ilícitos.
En este asunto está involucrado un menor de 17 años de edad J.C.L.B., quien está a disposición del Sistema Especializado en Justicia para Adolescentes.
Planificado
En su exposición del caso, los fiscales señalaron que estos dos individuos actuaron con las agravantes de alevosía, ventaja y traición, pues lo superaban en número, y la víctima no esperaba el ataque, pues presuntamente iban a llevar la camioneta con un mecánico de confianza del adolescente para que la revisara.
Sin embargo, por instrucciones de su patrón, la víctima manejaría la camioneta y no el presunto comprador.
Los fiscales aseguraron que estos individuos ya habían planeado cometer los delitos, pues la última comunicación de la víctima con su patrón fue a las a las 11:15 de la mañana del 31 de enero del año pasado, cuando le informó que ya tenía a los jóvenes a bordo de la camioneta, y a las 12:00 horas de ese mismo día, una vecina vio que arrojen el cadáver en una brecha de la calle 140 entre 39-B y 39-C de la colonia El Porvenir, en el poniente de la ciudad.
Además, de acuerdo con la información proporcionada por el dueño en su denuncia, en la camioneta no había algún objeto punzocortante o herramienta que pudiera ser utilizada como arma, pues la unidad estaba a la venta.
Otro argumento para sustentar la previa planeación de los actos delictivos fue que días antes, los ahora acusados y el propietario se vieron en el parque de Itzimná para que al adolescente probara el vehículo, ya que estaba interesado en adquirirlo pues necesitaba un vehículo de ese tipo para el negocio de frutería que pensaban poner.
Los fiscales también refirieron que la víctima recibió una golpiza e incluso tenía un hematoma en la frente, producto de la agresión de un objeto contundente.
Sin embargo, lo que lo mató fue que le clavaron un cuchillo que entró por el lado izquierdo y la punta salió por el lado derecho del cuello. Esta arma todavía estaba clavada en el cuerpo cuando fue arrojado en la vía pública en la colonia El Porvenir.
