Redacción De Peso
MÉRIDA, Yuc.- Nadie sabe ni nadie supo cómo se llamaba un hombre que hoy quedó muerto en la glorieta de Miguel Hidalgo, en el mero cruce de la avenida Hidalgo y la Itzaes.
Sólo se averiguó que presuntamente se trató de un indigente que desde la mañana cayó allá para no volverse a levantar. Junto de él estaba una botella vacía, de trago barato.
Fue un guardia de seguridad de la galletera “Dondé” quien dio aviso a las autoridades de la presencia de este sujeto. Primero pensó que dormía, pero dio aviso luego de fijarse que llevaba varias horas sin moverse y bajo el rayo del Sol.