Durante la audiencia de imputación por el delito de feminicidio agravado, la juez de control Elsy del Carmen Villanueva Segura oyó cómo fue que Alexis G. V., de 19 años de edad, llevó bajo engaños, golpeó brutalmente y ultrajó a su joven pareja, a la que asfixió con la almohada favorita de su bebé con la leyenda “Te quiero”.
Alexis era trabajador de un restaurante en Loma Bonita y podría ser castigado con pena corporal que va de los 30 a los 50 años de cárcel.
De acuerdo con la carpeta de investigación, Alexis conoció a la ahora occisa Berenice L. B., de 16 años de edad, cuando ésta tenía alrededor de 12 años, y no tardó mucho y se embarazó.
Las golpizas
Al principio, fueron a vivir a la casa de la mamá de la muchacha, en la colonia Salvador Alvarado Sur, donde, al poco tiempo, salió a relucir el carácter celoso y agresivo del imputado, pues acostumbraba a cachetearla y gritarle por cualquier cosa.
Allí vivieron más de un año y medio, tiempo durante el cual acostumbraba a beber constantemente y en ese estado era cuando más agresivo se ponía, no sólo en lo físico, sino en el aspecto psicológico, pues no la bajaba de infiel.
Eran tantas las escenas, que los papás de Alexis fueron a buscarlo y lo llevaron a su casa, pero al poco tiempo, regresaba pidiendo perdón, pero sin dejar de acosarla, al igual que la amenazaba con quitarle a su hija y le decía que la mataría.
Aún así, la pareja fue a vivir a la casa de los padres del ahora procesado, en la colonia Nueva Kukulcán, donde las agresiones continuaron, por lo que la muchacha regresó con su hija a la casa de su mamá.
Separaciones y ‘regresos’
En mayo pasado, después de varias separaciones y agresiones, Alexis le pidió a Berenice ver a su hija, cosa a la que accedió, pero ya no le quiso regresar a la niña.
Es por ello que intervino la Prodemefa y lo obligaron a devolver a la menor y firmar un convenio, pero no cumplió su palabra.
Al regresar nuevamente, fueron a vivir solos a una casa que rentaron en la colonia Nueva Kukulcán.
Sin embargo, las escenas de celos y las agresiones físicas continuaron, por lo que de nueva cuenta fue a vivir con su madre y hermanos.
En julio pasado, el sujeto entró por la puerta de atrás a la casa de la madre de la ahora occisa y la golpeó para llevarse por la fuerza a la bebé, sólo que no llegó lejos, pues con la ayuda de un vecino y la Policía se le ubicó y detuvo.
A raíz de todo lo anterior, supuestamente se había emitido una orden de restricción en su contra, la cual, obviamente, no surtió ningún efecto, pues los acosos continuaron, esta vez por medio de mensajes por whatsapp y porque continuamente se plantaba a las puertas de la casa.
El feminicidio
El pasado 4 de octubre, la mamá de la joven Berenice salió y su hija le dijo que iría al supermercado a comprar, cosa que no sucedió y desapareció con la niña.
La joven se vio con su ex pareja, en la vivienda que rentaron en la colonia Nueva Kukulcán, donde los problemas surgieron de nuevo, la golpeó brutalmente, causándole múltiples heridas en todas partes del cuerpo, al grado que le arrancó parte del cabello.
Luego la atacó sexualmente por ambas vías y, no conforme, la asfixió con la almohada favorita de su bebé, con la imagen de un monito y la leyenda “Te quiero”.
La causa de la muerte fue certificada como asfixia por sofocamiento obstructivo y comprensivo toracoabdominal, es decir, le tapó la cara y aplastó el estómago.
Más tarde, llevó a la bebé con sus familiares y tomó el triciclo de su madre, que acostumbra vender golosinas, y metió el cuerpo en una bolsa de rafia (pita) y alrededor de las 4 de la tarde de ese día fue a tirarlo a una brecha ubicada en la calle 12 por 99 de la colonia Nueva Kukulcán.
Al día siguiente, un señor de nombre Jorge U. C., que se dedica al desyerbo y recoja de envases pet, entró a dicha brecha a hacer sus necesidades y se topó con el cuerpo embolsado, por lo que dio parte a las autoridades, que determinaron que la mujer tenía entre 12 a 20 horas de muerta.
Con lo que no contaba el feminicida es que fue captado por todas las cámaras de videovigilancia de una vivienda marcada con el número 392, que sirvió para que la Policía Estatal de Investigación empezara a buscarlo.
Cabe mencionar que el triciclo fue encontrado abandonado en otra calle brecha cercana.
El dato
- Para el viernes 12 de octubre, a las 14 horas, se programó la audiencia de vinculación, luego que se le imponga la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa por todo el tiempo que dure el proceso que se instruye en su contra.
