Juan Pablo A. O. y José David F. M. fueron puestos a disposición de un juez de control por el asesinato del exempleado del INAH Carlos Alberto P. A. (a) “Cabinho”, al que a golpearon brutalmente para robarle sus escasas pertenencias, que se limitaban a unos cuantos libros.
Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- Jose David, supuestamente arrepentido, al enterarse de la muerte del arqueólogo, acudió ante las autoridades y habló en torno a los hechos.
Es por ello, que al quedar libre este martes, fue detenido en cumplimiento de una orden de aprehensión, al igual que su compañero, para que respondan por el delito de homicidio calificado.
Oficialmente, la Fiscalía General del Estado no ha informado sobre este hecho, sólo trascendió, cuando se levantó el cuerpo del ahora occiso, que la causa de la muerte pudo deberse a un “pasón” o mezcla de drogas, alcohol y medicamentos que ingería don Pepe.
Lo anterior, porque un día antes, su hijo lo llevó a un hospital, porque se quejaba de fuertes dolores, porque había sido golpeado por un par de sujetos que entraron a su casa.
Los hechos
Trascendió que José David, el 10 de agosto, fue a casa de su amigo Juan Pablo para pedirle hospedaje, en la colonia Nueva Hidalgo, donde empezaron a ingerir bebidas embriagantes.
A las 6 de la tarde, al quedarse sin dinero para seguir comprando bebidas, decidieron ir a casa de “Cabinho” en busca de algo para robar y vender, pues sabía Juan Pablo que vivía solo y era un adicto a las drogas y bebidas alcohólicas como él.
Al llegar al predio del ahora occiso, fueron sorprendidos por el dueño, al que sometieron y golpearon. Luego le robaron lo poco de valor que tenía, que fueron 4 libros.
Con lo que obtuvieron, siguieron ingiriendo bebidas embriagantes y al día siguiente, cuando estaban en la calle, riñeron y fueron detenidos por la Policía por disturbio.
Cuando salieron de la cárcel y enterarse de la muerte del ex custodio, José David se presentó a declarar.
