Se la partieron bien gacho dos vehículos que esta tarde se dieron tremendo golpazo en la esquina de las calles 58 y 47, a un costadito del parque de Santa Ana, con saldo de destrozos hasta para ponerse a llorar, pero lo bueno fue que nadie salió lastimado.
De acuerdo con lo que se supo en el sitio de los hechos, sobre la calle 58 de norte a sur iba un Aveo con placas tabasqueñas a cargo de Raquel P.B., quien siguió de largo al incorporarse a la calle 47 y que se da su tremendo trancazo de frente contra el costado izquierdo de un Versa, cuyo guiador manejaba sobre la segunda vía mencionada de poniente a oriente.
El golpe fue tan canijo que el Aveo quedó para llorar y soltó líquidos como si fueran su propia sangre, pero el Versa no se fue muy limpio que digamos porque el cachete izquierdo le quedó bastante perjudicado.
Eso sí, al momento de llegar agentes de la Policía de Mérida a tomar nota del chisme, se verificó que nadie había salido lastimado.
Al sitio se dejaron caer peritos de tránsito que pidieron la atención de las aseguradoras de los involucrados, y así se pudo llegar a un acuerdo en el sitio de los hechos para el pago de los destrozos.
(Fotos: cortesía)
