Redacción/De Peso
MÉRIDA, Yucatán.- A favor del anciano Juan Canul C., de 72 años de edad, se otorgó una prórroga de investigación complementaria de dos meses más, luego de ser acusado del delito de violación equiparada agravada por ultrajar en repetidas ocasiones a una menor de 12 años, que es familiar cercano a él y a la que los 14 años embarazó y ahora ya dio a luz.
Ante el juez de control Luis Edwin Mugarte Guerrero, los nuevos abogados defensores particulares del imputado, solicitaron dicha prórroga para interiorizarse de los hechos que se le acusan a su cliente.
Juan C. se encuentra en prisión, desde el 4 de julio pasado, como medida cautelar.
La defensa del inculpado había alegado que este sujeto, por contar con 72 años de edad, no puede permanecer en prisión y es necesario que se le declare inimputable.
Mugarte Guerrero consideró no procedente la excepción de la edad, ya que la Fiscalía argumentó no sólo la oficiosidad de la medida cautelar de prisión preventiva, sino que también señaló que esa prerrogativa no debía aplicarse, ya que se debe considerar el riesgo social, garantizar la seguridad de la víctima, el interés superior de niñas, niños y adolescentes.
También argumentó que está la doble garantía por el hecho de ser también mujer y su derecho a vivir libre de violencia, además de vivir en el predio contiguo a donde habita la menor.
Este sujeto fue detenido en cumplimiento de una orden de aprehensión.
Los hechos
Cuando la menor contaba con 12 años y fue a vivir al predio del imputado, bajo el cuidado del mismo, ya que su progenitor y hermanos no la podían cuidar.
Cuando estaba a punto de dormirse, el sujeto se subió en su hamaca, la despojó de su ropa y le impuso la cópula por la vía vaginal, diciéndole que quería que fuera su esposa y que no hablara.
Por temor y vergüenza, no opuso resistencia, aunque cerca estuvieran durmiendo otras personas.
Los ataques continuaron hasta que a principios de marzo pasado, su hermano notó cambios físicos en ella y le pidió a una familiar, que la llevara al médico, determinándose que tenía en ese tiempo 24.2 semanas de gestación.
Su progenitor fue informado, pero no hizo nada al respecto, concretándose en enviarla al domicilio de uno de sus primos.
Días después, la menor fue a buscar su ropa y allí encontró a su agresor, quien de nueva cuenta la atacó sexualmente.
