Tremenda cortada sufrió en una mano F. C., vecino de Celestún, producto de una riña en la calle 20 por 13 y 15 de Kinchil, la noche de ayer.
El hombre, de 60 años, relató a las autoridades que vino a convivir y refrescar el buche con unas chelas, pues es pescador y patrón de una embarcación, además ha trabajado con varios kinchileños.
Sin embargo, a eso de las 20:00 horas, cuando se empinaba con gusto su caguama en dicha calle, un tipo alcoholizado y drogado al que sólo conoce como «Toni» o «Cresta», empezó a reclamarle sobre por qué le dio «cortinas» en la chamba, al tiempo que sacó un cuchillo para lanzarle un tajo que le pegó en la mano izquierda.
Tras hacer su maldad, el kinchileño corrió a refugiarse en un predio vecino. Uno de sus cuates llamó rápido a la Policía Municipal, cuyos agentes auxiliaron al sexagenario con un torniquete y lo treparon a la patrulla para llevarlo al Centro de Salud local.
Más tarde, el vehículo de traslado se encargó de llevarlo al Hospital O’Horán de Mérida, debido a la profundidad de su herida. El pobre hombre aseguró que levantará su demanda.
