Para la basura quedó prácticamente un Nissan March cuyo guiador, bajo los influjos del alcohol, transitaba en sentido contrario sobre la calle 99 de la colonia Bojórquez y al llegar al cruce de la 65, como no vio la señal de alto (obvio, estaba del otro sentido de la calle), continuó su andar y se le asomó un camión que se le estrelló.
El accidente dejó lesionadas a dos personas que iban en el camión de transporte público de la ruta Madero.
Fue tal el impacto, que el eje delantero del camión tronó; fue necesaria una grúa para poder remolcarlon y llevarlo al taller.
Lo malo del asunto fue que al llegar un agente de seguros del March a atender el siniestro, resultó que el compacto era utilizado para la aplicación Didi y el seguro simplemente no respondió, es decir, más ensartado no pudo quedar el conductor responsable.
Al final un perito de tránsito de la SSP se hizo cargo del accidente y, aunque familiares del responsable intentaron llegar a un arreglo con la empresa de la unidad de transporte, el conductor beodo tuvo que pasar parte de su cruda en una fría celda de la Policía Estatal.
