Los dos decían ser inocentes. El chófer de un camión de la ruta Situr y un don que manejaba su Aveo se dijeron de todo lo que se pueda usted imaginar, pues el segundo se estampó en la parte trasera de la unidad de transporte público, pero aseguraba que no había sido su culpa.
Lo que pasó fue que ambos iban sobre la avenida Mérida 2000. El señor que manejaba el Aveo con placas ZBP-400-B se encontraba detrás del camión, a unos metros de llegar al cruce con la calle 37 de la colonia Xoclán López Portillo, y, según él, el camión invadió su carril, por lo que le fue imposible frenar y terminó dándole tremendo llegue en la parte trasera.
El camionero argumentó que fue el don quien manejaba con exceso de velocidad y por eso no pudo frenar cuando se acercó a su camión.
Aunque en el lugar del percance se veía claramente que la unidad de transporte público abarcaba los dos carriles.
Nadie resultó lesionado y después de varios minutos de echarse la culpa decidieron llamar a sus aseguradoras para que llegaran a un acuerpo, pues ellos no lo lograrían.
