Pecho a pechito: el drama indígena, ¿y la redentora Aparicio?

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Rollo: El Boffas
Mucho se hablado, hasta la saciedad, si la indígena oaxaqueña Yalitza Aparicio es o no una gran actriz y que si se merece o no el famoso Oscar que otorgan los sabelotodo gringos cada año, en esta ocasión, por la cinta “Roma” de Alfonso Cuarón la cual, parece ser, la octava maravilla del mundo moderno. En su caso particular, como mejor actriz.

Como si muchos no fueran ingenuos y no supieran que en ‘Joligud’ también hay mafias en el poder, pero cinematográfico, a la incipiente actriz mexicana y cuyo papel se reduce al de una “nana” que se convierte en una segunda madre del niño de la familia rica que vive en la capital del país, quizá la han sobrevalorado pero, con el tema vigente de los indígenas marginados y su eterna emancipación, ahora es la adalid de los derechos nativos.

Que nadie se engañe. Yalitza Aparicio vive ahora un período de gracia, ha saltado a la fama porque la cinta “Roma” –como se dice al principio- ya es catalogada casi a la altura de “Cumbres Borrascosas” o del “Ciudadano Kane”, del legendario Orson Wells y, claro, Cuarón es un tipo que sabe de dirección cinematográfica y con un Oscar ya de antecedente.

¿Y sí, en efecto, la chamaca mexicana gana el Oscar a la mejor actriz o mínimo esté nominada en la tercia? En caso de triunfo, saldrán todas las voces a decir que gracias a Yalitza los indígenas de México, incluyendo a los empobrecidos mayas, pronto serán reivindicados y de la pobreza saltarán a la digna medianía económica. En caso contrario: “¡le robaron el triunfo precisamente por ser indígena!”, clamarán los eternos inconformes.

Lo que pueda hacer doña Aparicio es muy bueno y, de entrada, no debe perder la humildad que hasta el momento la caracteriza porque ya lleva cientos de vestidos carísimos estrenados y, casi ninguno, le pertenece. De entrada, todos son rentados por los diseñadores que buscan sacar raja del personaje del momento.

Por lo que sí debería luchar la señorita Yalitza es en el activismo de buscar mejoras sustanciales para los indígenas, no solo de Oaxaca, sino también de otras partes del mundo. Aunque no lo crean, en Australia hay nativos y ya van en extinción gracias a las acciones de gente que, concretamente, desprecia a la raza nativa y que ahora, por cuestiones de mercadotecnia y publicidad, se dice su defensora. Para cuando ustedes lean este rollito, ya sabrán qué sucedió finalmente en la meca del cine mundial. Mientras, chequen algunos datos específicos de México.

POBREZA.- Por si Yalitza y ustedes no lo sabían, según el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), para 2015 el 45.5 por ciento de los habitantes del país estaba en condiciones de pobreza, alrededor de 53.3 millones de personas y de esta cifra, 72 por ciento, algo así como 8.2 millones, corresponde a la pobreza indígena. De ese 72 por ciento, el 45.4 corresponde a indígenas en pobreza moderada y el 26.6 a indígenas en pobreza extrema. Estas cifras contrastan con las de población no indígena, para la cual la pobreza moderada es del 35.5 por ciento y la pobreza extrema del 7 por ciento.

El Coneval encontró que la situación es más grave en grupos de indígenas con rasgos de pertenencia étnica «estructurales». ¿Qué significa esto? Si los indígenas hablantes en alguna de estas lenguas tienen mayor tendencia a vivir en zonas rurales y dedicarse a actividades manuales, serán más pobres; aquellos que se identifican a sí mismos como indígenas, pero hablan español, suelen vivir en entornos urbanos, trabajar en el comercio o los servicios, serán menos pobres.

ALIMENTACION.- En relación con la pobreza, el reporte del Coneval también señala que los indígenas enfrentan más carencias en el acceso a la alimentación que la población en general. A nivel nacional, ese porcentaje de carencias afecta a alrededor del 20% de los habitantes, mientras que para los indígenas llega a casi el 40 por ciento.

VIVIENDA.- En el caso del acceso a la vivienda, la población nacional con problemas para obtener estos espacios es poco mayor al 10 por ciento. En tanto, la proporción de la población indígena que enfrenta estas dificultades es cercana al 40 por ciento.

EDUCACION.- En cuanto al rezago educativo, éste es cercano al 20 por ciento entre la población en general. Por el contrario, entre los indígenas casi llega al 50 por ciento.

SALUD.- Este es el único rubro en el que son similares las situaciones de carencia de la población en general y de los indígenas, según el Coneval. Para ambos sectores, el porcentaje de personas con problemas para acceder a los servicios de salud es superior al 20 ciento.

JUSTICIA.- Otra dificultad que enfrentan los indígenas en México son los obstáculos para acceder a la justicia, según la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNHD). Esto se traduce en que cuando un indígena se ve involucrado en un problema legal, encara una alta probabilidad de tener un proceso judicial sin apego a la ley, que en última instancia termine con una sentencia de prisión. La CNDH informó, hasta el 2015, que había más de 10 mil indígenas en cárceles mexicanas. De ellos, la mayoría «no han sido asistidos por un defensor e intérprete o traductor acompañante, e incluso en muchas ocasiones desconocen el motivo por el que están internos».

DISCRIMINACION.- Este último dato refleja que la situación de los indígenas es la discriminación que sufren de parte de otros sectores sociales. El Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) dio a conocer una encuesta en donde el 44.1 por ciento de los mexicanos considera que no se respetan los derechos de los pueblos indígenas. Se trata del porcentaje más alto, por encima de quienes creen que no se respetan los derechos de personas homosexuales (42.4 por ciento), de migrantes (40.8), adultos mayores (34.8) y personas con discapacidad (34 por ciento).

Amiguitas y amiguitos, ya saben: sugerencias para que Yalitza triunfe y no sea absorbida por el glamour de quienes nunca la aceptarán como “una de los suyos o suyas”, pero bien que se aprovecharán de su fama, enviarlas a [email protected] y/o [email protected]

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