Rollo: Ambrosio Gutiérrez Pérez
Tanto el presidente López Obrador como el gobernador Aysa González ya están en otros temas, pero en Campeche continúan los ecos de la visita presidencial a Calakmul y lo que ahí se dijo. La reunión formal fue con pueblos indígenas, pero rondaron otros temas fundamentales para Campeche y el país.
El Presidente volvió sobre el tema de la corrupción. Los presidentes anteriores sabían de la corrupción, la consentían y permitían, nadie los engañaba, aseguró. Por supuesto, así era. La mayor tajada se la llevaban los presidentes y de ahí para abajo todos se sentían con derecho a robarle al pueblo.
Lo mismo ocurría con los gobernadores y con los alcaldes. Por eso se hicieron famosos los “nuevos ricos” que amasaban fortuna en 3 o 6 años; por eso se hicieron famosas frases como “el que no transa, no avanza” o “no me des, ponme donde hay”.
López Obrador ratificó que se hará consulta a los pueblos por donde pasará el Tren Maya, porque ahora también le quieren echar abajo ese proyecto, como intentaron hacer con el aeropuerto de Santa Lucía, y sí quiere terminar la obra antes de que concluya su mandato. Es consecuente pues.
Pero el gobernador Aysa también tuvo oportunidad de subrayar que todos los grupos sociales tienen algo que aportar a la sociedad y al estado, y consideró imperativa cumplir a los pueblos indígenas de Campeche.
Tuvo oportunidad de reiterarle al Presidente la necesidad de establecer tarifas más bajas por consumo de energía eléctrica, que es muy importante pues aquí también hace un calor de infierno. ´
Lo más importante, sin embargo, es el ejercicio de la política que ya están haciendo ambos gobernantes para resolver asuntos y empujar obras que beneficien, tanto a comunidades indígenas (tema de la reunión del domingo) como a los campechanos en general. Eso tendrá buenos resultados si continúa así.
Rendijas
–Circuló el fin de semana una nota sobre la supuesta salida del ex senador Raúl Pozos de las filas del Partido Revolucionario Institucional y su incorporación a Morena. Y en las horas siguientes, por esa fakenews, lo felicitaron, le aplaudieron, le dijeron arribista, traidor, saltibanqui, y varios lindezas más.
En varias entrevistas que ha concedido, tanto en radio como en televisión en las últimas semanas, Pozos no ha revelado nada. Bueno, todo mundo sabe que quiere ser gobernador, que está trabajando con un equipo (quizás el más grande y organizado que tenga algún aspirante a la gubernatura) y también que desde hace varios meses está lejos del PRI.
Todo mundo sabe, bueno, en el mundo de la política local, que desde antes de la elección del año pasado lo buscaron morenistas de hueso colorado para convencerlo de irse a las filas lopezobradoristas, incluidos varios senadores que fueron sus compañeros, y que no tomó esa decisión.
Al mismo tiempo todo mundo sabe, reitero, en la política local, que tuvo, y tiene, diferencias con el ex gobernador Alejandro Moreno, hoy dirigente nacional del PRI. Y todo ese mundo asegura que, por esa razón, está lejos de una candidatura priista aunque una reciente encuesta señala que es el mejor posicionado para ser candidato a la gubernatura.
La noticia de su salida del PRI, según hemos podido confirmar, es falsa, pero podría ser verdadera en poco tiempo. Eso dicen en ese mundillo de la política y de sus allegados que ahora sólo van a donde los quieren.
