MÉRIDA, Yucatán.- Pese a que el número de contagios de Covid-19 se disparó en Umán y que las autoridades municipales decidieron aplicar restricciones para frenar el avance de la enfermedad, ayer muchos ciudadanos siguieron en las calles, mercado principal y en los parques como si nada pasara.
El miércoles, el alcalde Freddy Ruz Guzmán anunció que el municipio se colocaba en semáforo rojo y se establecieron nuevas medidas para reducir la movilidad y prevenir que más gente se vea afectada.
Sin embargo, ayer las filas en paraderos fueron más nutridas que otros días, las personas hicieron uso de bicitaxis sin las medidas sanitarias como sana distancia y uso de cubrebocas.
El centro se notó abarrotado, aunque algunas personas cumplieron con la disposiciones, en la plaza central también el flujo de gente fue normal, pese al anuncio de sus autoridades. A partir de ayer, entre las nuevas medidas para evitar el avance de Covid-19 en Umán, se decidió el cierre de los negocios no esenciales a las 6:00 pm, de lunes a viernes, y sábados y domingos únicamente operarán en la modalidad de servicio a domicilio.
Los parques, campos y canchas de usos múltiples se mantendrán cerrados; el mercado municipal se mantendrá cerrado una semana más hasta el lunes 27 de julio.
La movilidad de vehículos está restringida en horario de 10:30 de la noche a 5:00 de la mañana, por lo que, indicó la autoridad, se realizarán operativos de vigilancia con apoyo de las policías estatal y municipal.
Amalia Soria Cupul, una de las locatarias del cerrado mercado y que ahora busca el sustento familiar a través de la venta en redes sociales, dijo que las personas no se están cuidando y creen que el coronavirus es un juego.
“Muchos locatarios seguimos los procedimientos de sana distancia y el uso de cubrebocas, pero una parte no lo hizo, y la mayoría de las personas que acudían al mercado se negaban a hacerlo”, apuntó.
