RUSIA.- En Siberia, las autoridades arrestaron a un sujeto llamado Sergei Torop, quien decía ser la reencarnación de Jesucristo y al frente de la secta “Iglesia del Último Testamento” extorsionaba a los miembros para exigirles dinero.
Con él fueron detenidos otros dos líderes del grupo por el mismo delito, además de que se les señala por causar daño físico y psicológico a sus seguidores.
Según se informó, este sujeto creó en 1991 dicha secta y poco a poco comenzó a ganar seguidores, y a últimas fechas vivía con éstos en una zona aislada en el bosque de Siberia, en donde fue arrestado.
Sergei Torop aseguraba a sus seguidores que formarían parte de una nueva Arca de Noé y se salvarían del desastre mundial que próximamente llegaría.
Antes de ello, decían vivir en comunión con la naturaleza, rechazando en particular la carne, el alcohol y el tabaco.
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