El parlamento del estado de Kadana, en Nigeria, aprobó una ley que castiga con la castración a los violadores, quienes incluso podrían ser sentenciados a muerte dependiendo de la gravedad de sus actos.
Lo anterior derivó de la alarma generalizada en ese país, ante el aumento en las violaciones de mujeres y niños, lo cual llevó a manifestaciones de personas que pedían sanciones más severas para estos delitos.
Funcionarios de Kadana celebraron que el parlamento haya elevado los castigos en los casos señalados, pero por el momento la ley aplicará únicamente para las personas que abusen de niños menores de 14 años.
Para el resto, las penas máximas actuales por violación en Kaduna son de 21 años de prisión cuando la víctima es adulta, y la posibilidad de cadena perpetua.
Como era de esperarse, esta nueva ley no fue bien recibida por diversas organizaciones que defienden los derechos humanos.
En Nigeria, alrededor de 2 millones de mujeres y niñas son violadas cada año, pero apenas el 28 por ciento de estos delitos son denunciados.
