Un sujeto enfermo de coronavirus mandó a cuarentena a 35 trabajadores de una clínica del IMSS en la Ciudad de México, pues al no informar que había viajado al extranjero, se le mandó a su casa como un caso sospechoso más, pero luego regresó para confesar lo de su viaje, y hubo que tomar medidas extremas.
Todo se dio el miércoles pasado en el hospital del IMSS de Tlaltelolco, en la Ciudad de México.
Hasta ahí llegó el sujeto, identificado como José Luis, indicando que tenía síntomas de Covid-19, lo internaron, se le aplicó un cuestionario y nunca dijo que acababa de regresar de un viaje a Jerusalén, con escala en Alemania.
Como no dijo ese detalle, se le mandó a su casa sin reportársele sospechoso. Sin embargo, al día siguiente regresó y confesó lo de su viaje, por lo que de inmediato se tomaron las medidas necesarias, se le internó y aisló porque está delicado pues es hipertenso, y se puso en cuarentena a los 35 trabajadores de la clínica que estuvieron cerca de él.
Se mandó a sus casas por dos semanas y en aislamiento a camilleros, auxiliares, médicos, radiólogo, becarios, técnicos, inhaloterapeutas y hasta al señor de la limpieza.
Además, personal de la clínica tuvo que desinfectar todas las áreas donde estuvo el paciente.
