Enigmas: El niño juguetón

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Rollo: Jorge Moreno
Hoy les presentamos una historia paranormal que aunque no ocurrió en nuestro estado no deja de ser interesante y de cierta forma está ligada a Yucatán, se trata de un caso ocurrido en el municipio de Coyoacán en la ciudad de México y es conocido como “la leyenda del callejón del Aguacate”.

Este caso es muy popular en muchos sitios del país y de hecho aunque ya la había leído en libros y en internet, hace poco unas personas nativas de la ciudad de México pero que radican en Mérida, acudieron al Museo Paranormal y nos sugirieron que habláramos de ese caso de su tierra, por lo que hoy procedemos a cumplirles:

El Callejón del Aguacate se ubica en la ciudad de  Coyoacán. Es un callejón, cercano a la calle Francisco Sosa en el barrio de Santa Catarina, conocido por todos por guardar varios misterios y leyendas. Además hay algunos habitantes que juran haber vivido momentos paranormales.

Una de las leyendas que se asocian a este lugar tiene su origen en la remota época de Lázaro Cárdenasen la década de los años treintas del siglo pasado. Se dice que vivía por allí un militar solitario un tanto distante con los vecinos. Solía pasar por el callejón camino de casa y en muchas ocasiones pasaba por delante de un niño que se le quedaba mirando su uniforme y los diversos trajes militares de gala.

Al militar le molestaba que el niño casi siempre le pedía que jugara con él. Tanta insistencia provocó una mala reacción del militar que le golpeó y lo acabo ahorcando, colgándolo de un árbol de aguacate del callejón, se dice que fue en el árbol que está justo detrás de un altar dedicado a la virgen.

Tras el incidente, el atormentado hombre se arrepintió de haber cometido su horrible asesinato, y con el objetivo de sanar sus demonios internos, mandó poner en la esquina del callejón otro altar, para que cada persona que pasara por ahí expiara sus pecados con un Padre Nuestro.

Algunas personas han dicho que si te acercas al árbol se oyen llantos y se siente una presencia, del niño que te invita a jugar incluso algunos han visto la cara del niño en la corteza del árbol.  De hecho a este suceso se le conoce como el caso del “niño juguetón”

También se ha dicho que si vas a medianoche, el lugar se nota tenebroso y que la virgen del altar que mencionábamos ha llegado a llorar sangre, aunque esto quizás esté más relacionado con la sugestión, ya que lo angosto del callejón, el empedrado de su piso y la antigüedad de las casas, hace que se vea lúgubre.

La segunda leyenda dice que una familia que vivía en el callejón era muy aficionada a usar la Ouija. Los espíritus les respondían sus preguntas y una noche uno de los espíritus indicó que todos los presentes se iban a defraudar entre ellos. Después de conocer eso, el padre de esa familia no quería ser traicionado por nadie así que empezó a matar a todos los que estaban alrededor de la ouija para posteriormente enterrarlos en el jardín.

De esto no hay informes periodísticos que confirmen los asesinatos pero se dice que cuando caminas por ahí se escuchan los gritos de ayuda de los que fallecieron e incluso se ve la cabeza decapitada de uno de ellos.

Una de las personas que me comentó esta leyenda en el Museo Paranormal, me dijo que ese caso es tan conocido como los casos de “la hacienda de Cholul” y la “ex Clínica Peninsular” en Yucatán y finalizó invitándonos a conocer este sitio. Esperamos ir pronto por ahí.

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