BRASIL.- Sorprendidos quedaron los habitantes del municipio brasileño de Planalto, en el estado de Río Grande del Sur, cuando se enteraron que una madre “modelo” asesinó a su propio hijo.
La mujer fue identificada como Alexandra de 33 años e inicialmente fue ella quien dio parte a las autoridades de que algo le había pasado a su hijo, pues ella aseguró que había desaparecido misteriosamente.
Era conocida por ser perfeccionista y ser muy organizada, pero en esta ocasión no fue así, debido a que cambió varias veces la versión que dio a la policía porque comenzaron a sospechar de ella.
El asesinato fue llevado a cabo el 15 de mayo del 2020 y diez días más tarde el cuerpo de Rafael de 11 años fue encontrado en una gran caja de cartón en el garaje de una casa cercana.
La mujer cambió una vez vez más la versión de los hechos diciendo que le dio pastillas para dormir y se le fue la mano, pero la necropsia reveló que fue asfixiado, por lo que por fin declaró que fue lo que pasó en realidad.
Al despertarse por la madrugada, fue a la habitación del niño y lo encontró todavía despierto, jugando con su teléfono celular. En ese momento, perdió el control y tomó una cuerda de la lavandería para estrangularlo.
“Rafael estaba agitado y se dormía a alrededor de las 3 de la mañana. No me detuve a pensar por qué hice eso“
