Un total de 7 soldados fueron detenidos por la violación de una niña de 12 años en la comunidad indígena de Resguardo Gito Dokabú Embera Katío, en Colombia, el pasado lunes 22 de junio cuando esta se encontraba recogiendo guayabas cerca de un campamento militar en el departamento Risaralda.
Según el fiscal general Francisco Barbosa, los soldados –quienes presentaban su servicio militar obligatorio- aceptaron los cargos por “acceso carnal abusivo”, seis de ellos en calidad de autores y uno como cómplice, por lo que fueron puestos en prisión.
La menor de edad también fue secuestrada por los integrantes del Batallón de San Mateo y fue la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) quien hizo pública la denuncia el miércoles 24 de junio a través de un comunicado donde el gobernador del Resguardo, Juan de Dios Queragama, pidió que los soldados fueran entregados a la justicia indígena.
Investigarán «condiciones institucionales» que llevaron a violación
El juez del municipio de Pueblo Rico, lugar donde ocurrió la violación, tomó la decisión de enviar a la cárcel a los implicados menos de 72 horas después de que ocurriera el delito, acotó el fiscal general Francisco Barbosa.
La indignación alcanzó al presidente de Colombia, Iván Duque, quien sugirió que con el juicio a los 7 soldados se podría inaugurar la reforma al Artículo 34 constitucional que otorga cadena perpetua a “violadores y asesinos de niños”, retoma la agencia EFE.
Sin embargo, la Defensoría del Pueblo solicitó además tanto al Ejército como al Ministerio de Defensa que lleve a cabo una investigación exhaustiva respecto a las “condiciones institucionales” que propiciaron la violación de la niña de 12 años.
La Defensoría añadió que cuando la violencia sexual es perpetrada por integrantes de la fuerza pública que tienen el uso de las armas del Estado, se considera una “grave violación a los derechos humanos”.
Por su parte, el mayor general Luis Mauricio Ospina, comandante de la Quinta División del Ejército a la que pertenece el Batallón involucrado en la violación, dijo que ya se aplicaron los protocolos para que la investigación concluya satisfactoriamente.
Los soldados involucrados son reclutas de entre 18 a 22 años a quienes se les relevó de su servicio, además de que el caso se presentará ante la justicia penal ordinaria en lugar de un tribunal militar.
#ATENCIÓN| Desde @ONIC_Colombia rechazamos y condenamos el abuso sexual a una niña indígena Embera por parte de miembros del @COL_EJERCITO. #NuestrosCuerposSeRespetan #JusticiaParaNiñaEmberaEs. @luiskankui @IvanDuque @CarlosHolmesTru @mindefensa @ONUHumanRights @PGN_COL. pic.twitter.com/Q9R47NM5QA
— Organización Nacional Indígena de Colombia – ONIC (@ONIC_Colombia) June 24, 2020
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(Info: sdpnoticias/Foto de contexto: archivo Semana)
