Trascendió del heroico acto anónimo de un amante de las chelas en Ciudad Madero, Tamaulipas.
Muchos lo hubieran tomado por un briagales cualquiera, pero mientras tomaba los tragos y al ver que la casa de su vecina (ausente) se estaba quemando, en la avenida central de la colonia Nueva Cecilia, fue de volada y con un cincel y un martillo rompió el candado de la entrada.
Lo primero que hizo fue salvar a unos cachorritos que estaban ladrando desesperados por el lado de la cocina. Después se puso a apagar el siniestro con su camisa, trapos y cubetas con agua. Y luego llegaron otros vecinos a ayudar al igual que bomberos.
¡Qué hombre!
(Con información de redes sociales)