Autoridades de una comunidad indígena de Chiapas condenaron a dos mujeres por cargos de brujería, obligándolas a pagar 200 mil pesos por los “daños” que causaron a una familia.
Las sentenciadas son madre e hija, y el caso se dio en la comunidad tsotsil de Cuchulumtic, y toda la población estuvo de acuerdo en que deben pagar la multa antes del 2 de noviembre próximo.
El caso refiere que un hombre de 35 años denunció ante las autoridades comunitarias que su propia madre y su hermana le hicieron brujería hasta provocarle supuestos problemas de salud.
En su versión de los hechos, su madre juntó animales como lombrices, gallinas y otros, además de hierbas, los molió y los puso en su caldo de guajolote “para hacerle mal”.
El hombre, de religión evangélica, explicó que comer eso provocó que se pusiera “loco y nervioso”, por lo que ambas mujeres fueron acusadas de brujería, y en una audiencia de tres horas ante las autoridades indígenas se les sentenció a pagar 200 mil pesos.
Los habitantes del lugar, que estuvieron presentes, estuvieron de acuerdo en que paguen la multa porque el hombre está loco, mal de la cabeza, y fue “por culpa de su mamá” y su hermana.
El proceso se llevó a cabo con total autonomía de esta comunidad indígena, por el sistema de “usos y costumbres”, lo cual las autoridades civiles están obligadas a respetar.
