CHIHUAHUA.- Violenta muerte encontró una mujer de 23 años, de la etnia ramámuri de Chihuahua, cuyo cuerpo fue encontrado dentro de un predio, y presentaba visibles signos de violencia además de que fue degollada.
La mujer, de nombre María E.B., dejó en la orfandad a un pequeño de 3 años de edad, y a sus compañeras de trabajo ya había dicho que estaba recibiendo amenazas en su teléfono celular.
Los hechos se dieron en la capital de Chihuahua, en donde el jueves su familia reportó la desaparición de la mujer tras salir de casa, iniciando la búsqueda por parte de las autoridades, hasta que se le halló en la maleza de un predio abandonado en una colonia de esa ciudad.
Tras las primeras indagatorias se determinó que antes de fallecer degollada, la mujer sufrió violencia, tal y como confirmaron médicos legistas que se hicieron cargo del cuerpo.
Compañeras de trabajo de la hoy occisa informaron a las autoridades que ella les había comentado que recibía mensajes amenazantes a su teléfono celular, pero no sabía de quién eran ni el motivo, por lo que se mantenía asustada y en zozobra.
Se informó que María E.B. es originaria de Gomisachi, municipio indígena de Guachochi, pero llegó a la capital chihuahuense desde hace algunos años con la intención de superarse.
Trabajaba en una fondita de comida mexicana, en donde sus compañeras la describieron como una mujer responsable y trabajadora.
