Tras el mega operativo y despliegue militar para la captura de Ovidio “N”, alias “El Ratón”, se dieron a conocer las imágenes de la casa donde vivía junto con su familia en la sindicatura de Jesús María en Culiacán, Sinaloa.
La casa de uno de los líderes del Cártel del Sinaloa, quien fue detenido la madrugada del jueves, es conocida en la zona, además de que el movimiento de camionetas blindadas era normal para los pobladores del lugar.
Medios de comunicación tuvieron acceso al predio en donde al llegar se puede ver casi toda la casa, desde la puerta principal, repleta de orificios provocados por la metralla que utilizó el Ejército.
De igual forma, la casa luce literalmente “desbaratada”, además de que la mayoría de los muebles están destruidos.
Durante el recorrido que se realizó se puede ver la habitación de las hijas de Ovidio, de 3 y 9 años de edad, en la que se puede apreciar una colcha rosa con rastros de sangre.
También se encontraron grandes manchas de sangre en el baño y en el cuarto de lavado.
En la supuesta recámara de Ovidio se puede ver una cama King Size, tina de hidromasaje, cajas de relojes Rolex, joyas y bolsas de lujo.
En todo el predio había casquillos percutidos de la refriega del jueves pasado, cuyo intercambio entre crimen organizado y fuerzas federales duró más de siete horas en Jesús María: no hay parte de la residencia de Ovidio Guzmán que no tenga rastros de bala, muchos de Barret calibre 50.
En el gran patio delantero con techos de teja se veían automóviles de lujo como camionetas marca Mercedes Benz o vehículos RZR, conocidos como todoterreno, además de varias cuatrimotos, las cuales ya estaban movidos respecto al día anterior algunos con el logotipo de un ratón.
Mientras tanto, afuera de la casa se ven camionetas modificadas, conocidas como monstruos, cuyos cristales, aun del blindado, terminaron destrozados por la metralla oficial y que dan cuenta de la cruenta batalla del jueves negro, de un nuevo Culiacanazo.
